Capitulo VII. "La forma natural de la educación"
El problema de la educación aparece con claridad ya que el objetivo es convertir el individuo particular en un representante de nuestro súper-yo es decir en un buen ciudadano igual el vehículo se la tradición y de todos los valores ancestrales que se han ido transmitiendo de este modo de generación a generación.
La historia del arte demuestra que en el momento que se le sujeta a estos valores intelectuales y moralistas tiende a caer por la oposición entre los valores instintivos y convencionales, es decir, entre el ello y súper-yo.
La teoría de Platón sobre arte y educación muestra la objeción que él hacia dirigida a la realidad y no contra el carácter sensual e instintivo del arte, sino contra la confusión de los valores morales y estéticos.
Platón distingue tres grados de objetos: primero la forma absoluta y externa, segundo el objeto perceptible y tercero, la obra del arte. A estos tres grados de la realidad corresponden tres grados del conocimiento:
El grado más elevado grado la realidad y el conocimiento corresponde a la concepción freudiana del Súper yo y el segundo grado puede parangonarse con la vida consciente del Yo.
Platón considera el arte como la copia de una copia y que el lenguaje ha engendrado las malas interpretaciones de su historia como imitación, o mimesis. Pero platón considera la obra del arte como un acontecimiento que corresponde a otro.
Las objeciones de platón puedes reducirse a dos: la racional y la estética. En toda la filosofía de platón afirma que la razón es la parte más noble de nuestra naturaleza y que una vida gobernada por la razón puede ser buena y feliz. Para Platón el arte puede ser sensual y seductor.
Platón asigna al arte un papel estrictamente funcional en materia de educación es una favor que puede, con el debido cuidado, extenderse a los niños en la fase de educación.
A pesar de los años que han pasado, podemos decir que sobemos mucho sobre el arte egipcio, e incluso más de lo que alguna vez supo Platón.
El principal argumento de Platón es que considera el arte en general como una expresión de las partes emotivas e indisciplinadas de nuestra naturaleza.
En términos freudianos platón considera el arte como una irrupción del inconsciente.
El autor piensa que para darle un lugar más importante al arte será necesario desafiar la filosofía racional de platón así como toda influencia religiosa o intelectual.
Se hace una distinción entre dos aspectos de la educación artística: La educación del individuo como una artista y la del individuo encaminada a que pueda apreciar el arte.
Habla de los niños superdotados, afirmando que poseen una constitución somática que es más sensible de lo normal a estímulos externos como la luz, el color, el sonido y los volúmenes. Pero dice que es más aceptable decir la teoría de que todos los niños nacen con el equipo físico necesario para ser unos artistas.
Se podrían tomar medidas para preservar la espontaneidad creadora de la infancia; pero hoy en día cuando un padre decide hacer del niño un artista cree que se logaría cuando la elección de una vocación se encuentre en relación con un conocimiento exacto de la disposición innata del niño y dice que se entiende por facultad plástica la capacidad de expresar por medio de materiales manejables las intuiciones de modelos, formas y colores que surgen del nivel instintivo de la mente, solo esta facultad distingue el artista de vocación de cualquier otra persona de sensibilidad completa desarrollada.
Podría decirse que el desarrollo artístico consta de dos procesos: el inmediato conocido como INSPIRACIÓN y el y el de elaboración que se encuentra en la vida organizada de la vida consciente.
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